Me miraste como si fuera verdad

y fue la primera tarde de mi vida.

_

Lo de la voz de tu luz sobre mis hombros,

el ruido en los huesos,

el norte claro y honesto, la risa sonrisa,

fueron milagros de un amor

que se dijo todo desde el minuto cero.

_

Como si yo fuera verdad.

_

Fui terco con la idea de no perderme

hasta que di con tu espalda,

me enamoré del rojo en la piel

y de las manos buscándose

mientras íbamos en taxi,

como si tú fueras verdad,

de los errores y las llamadas,

del calor y la terraza,

de los viajes y la torpeza,

del poco baile y la tristeza.

_

Ya no recuerdo, recuerdo mal,

casi recuerdo, recuerdo poco,

mas me alcanza para el siguiente engaño.

_

Me miraste

como si fuera verdad,

como si fuera verdad,

como si fuera verdad.

_

Y es lo único que me repito.

Ingeniero y poeta Juniorista San Juan del Cesar, Colombia

También puedes leer