Como diría Echandía… ¿El Poder Para Qué?

Presidente en varias oportunidades, filósofo, liberal y humanista; Darío Echandía fue designado gobernador del departamento del Tolima para apaciguar el espiral de violencia que vivía el país y durante la revolución en Marcha – que no es una idea de Cristo, sino del partido liberal de antaño – logró importantes cambios en la manera de gobernar y de acercarse a las comunidades que más lo necesitaron. Era también la época en la que en el Tolima estaban los grandes resguardos de Natagaima, Chaparral y Ortega. La época de Quintin Lame, sobre quien espero volver más adelante en otra columna, pues, la lucha por su identidad indígena y el territorio de sus ancestros me recuerda la lucha que emprendió Francia en medio de tanta falsa esperanza. “No serán aptos para trabajar en la administración pública quienes piensen que el país está dividido entre buenos y malos” dijo Echandía durante su discurso de aceptación en la gobernación del Tolima, haciendo alusión a división entre liberales y conservadores, los dos partidos políticos y si se quiere, los dos paradigmas ideológicos (con sus tintes y diferencias) que se juegan el poder en las próximas elecciones. 

¿El poder para qué? se preguntó Echandía, luego de la muerte de Jorge Eliecer Gaitán el 9 de abril de 1948. Esa misma frase ha hecho carrera en la política del país y acá en Les Juanetes, hemos tenido sendas discusiones y acaloradas conclusiones -como de media hora cada una- con relación al momento político y la realidad que vive el país con cada coalición y con las listas a congreso de cada una de las partes. Creo que la conclusión principal y que motiva esta reflexión la hizo Ana Carolina Calvo, cuando dijo: “Yo no entiendo qué es lo que quieren hacer en el PH”, básicamente porque con la conformación de listas del PH mucha gente no entendió qué es lo qué está pasando al interior de esa colectividad.

Se suponía que el Pacto era la renovación de la política y que allí confluirían todos los movimientos social y políticamente excluidos del país, que iba a incluir en una gran alianza diferentes visiones y posiciones de la izquierda, como las voces feministas de Sara Tufano y Juana Afanador, la lectura legal de Miguel Del Río e incluso se suponía que iban a tener representación las víctimas en cabeza del movimiento de las madres víctimas de falsos positivos. Sin embargo, la llegada de personas cuestionadas como el pastor Saade, los coqueteos con Luis Pérez y la conformación de listas a Senado y Cámara sin la claridad suficiente, hacen que la respuesta a esa pregunta que se hace Ana y que nos hacemos muchos colombianos, sea: Lo mismo que ha pasado con todos los movimientos políticos en Colombia, solo esperan llegar al ejercicio del poder y para eso hacen alianzas y acuerdos con el que sea.

Obvio amigo lector, que si sumerced pertenece a las toldas del Petrismo y del Pacto Histórico, se sentirá atacado y vituperado, eso mismo sintió Iván Cepeda y lo hizo explicito en su cuenta de Twitter hoy – Ayer para el momento de publicación de esta columna- cuando se hizo evidente la presencia con el número 104, de Sandra Villadiego, esposa del excongresista Miguel Ángel Rangel, que fue condenado por parapolítica. Y lo sentirá así, porque quién más ha denunciado el paramilitarismo en el país es el mismo Senador y hoy candidato Gustavo Petro. ¿Y entonces la coherencia?

También resulta desconcertante la decisión de darle la cabeza de lista de la cámara en el Atlántico al actor Agmeth Escaf,  – que es muy buena persona y tiene muchos seguidores en twitter y puede ser soñado para ir a un asado y tener una sensibilidad increíble sobre temas sociales y un verraco para preparar frutiño de corozo- sobre el abogado Miguel Ángel del Río, que todos sabemos las luchas que ha dado en el campo legal. ¿Las elecciones serán entonces un pulso de recordación y de imagen? o estarán basadas en un acuerdo programático serio y propuestas viables para los cambios que necesita el país.

Siendo positivos el PH va a sacar en el mejor de los escenarios 20 senadores, en el peor de los escenarios serán entre 10 y 15, lo que dejaría afuera voces valiosas como las de Wilson Arias y la de César Pachón según la forma en la que están las listas hoy. No se entiende algunos de esos movimientos y acuerdos políticos  y están más relacionados con vínculos sanguíneos-políticos que con trabajos serios y liderazgos naturales. A veces en política es mejor ser amigo de, cuñado de, o esposa de, que trabajar desde las bases y eso es lo que están sintiendo muchos de los militantes del PH, sin mencionar claro a los ilustres influencers que tampoco aparecen.

Con lo que estamos viendo y con las alianzas que todos están haciendo, los avales repartidos y los acuerdos regionales con gamonales, lo mejor será pensar de nuevo en la frase del presidente Echandía, pero ahora en otra: “Colombia es un país de cafres”.

Adenda al Nuevo Liberalismo o ¿al Neoliberalismo?

También salió lista del nuevo liberalismo de los Galán y al menos los tres primeros nombres apuestan por una renovación importante en el Senado, Mabel Lara, Carlos Negret y Sandra Borda son voces nuevas e interesantes que sin duda van a enriquecer el debate en el Senado, si su critica hacia Mabel es que es periodista, hágase las dos maestrías en política que ella tiene; y si su critica a Sandra existe con o sin razón, léala y encontrará la razón de su pensamiento parroquial hacia ella. Lo de Negret es sin duda NECESARIO en un país que viola constantemente los derechos humanos. Bien por ellos tres en su aspiración.

La semana entrante hablamos del verde, hay plazo de diez días hábiles a ver si Angélica Lozano va o no va. Y si el partido se disuelve y sus reductos van para otros lados.

Zoociólogo (zootecnista + Sociólogo) papá de SGE, esposo de Natalia, lector de cuentos para 😴 Padawan de phd en Estudios Sociales. estoy en @biodiversoscol

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