Ética: la fantasía de la ingeniería de materiales, la pesadilla de la física y el #mvm de muchas personas – segunda parte

Hoy finalizo mi reflexión sobre la ética agregando otras características que debe tener este constructo para que pueda ser algo menos ambiguo pero, sobretodo, menos maleable y más práctico. En este orden de ideas, continuo con la segunda de las condiciones estructurales de este concepto:

  1. Un poco más adelante en este constructo, encontramos que la ética pertenece a las personas, es decir que no hay ética de las cosas ni ética animal. La ética es un constructo propio y exclusivo de aquellos seres con conciencia plena creado para orientar su comportamiento. No podemos esperar que los animales se comporten de acuerdo a nuestros parámetros éticos, estos actúan de acuerdo a sus instintos y en la mayoría de los casos (hay algunas investigaciones que dotan de conciencia algunas actuaciones de los animales y por este motivo no generalizo la premisa) sin razón de qué, para qué, por qué o cuáles consecuencias tendrá su actuar, es decir, sin conciencia de sus actos, por lo tanto libres del sometimiento a juzgamientos éticos de los mismos. 
  2. Otro de los condicionantes que enmarcan esta conceptualización de ética está dado por la dualidad de la persona como individuo pero a la vez, como ser social. Esto implica que la ética debe llevar al perfeccionamiento como ser individual, con necesidades y deseos propios pero a la vez lo debe insertar en una sociedad en la cual interactúa con otros individuos en igualdad de condiciones y en búsqueda de la realización de sus sueños. Esto lo enfrenta al dilema de la vida como individuo y la vida en sociedad, dilema en el que constantemente tiene que propender por la conservación y mejoramiento de su vida a la vez que tiene que propender por la conservación y mejoramiento de la vida de los demás individuos de la sociedad, lo que llamamos respeto a los demás y que tiene como propósito buscar el florecimiento del individuo pero consciente de su rol dentro de una sociedad. Lo anterior quiere decir que lo ético del comportamiento de la persona es a la vez aquello que es ético para la sociedad y que, al tiempo que le permite su florecimiento como persona, al ser consciente de su rol dentro de la sociedad le permite a la sociedad su florecimiento como consecuencia de su actuar. en pocas palabras, aquello que podemos llamar NO ético es cualquier cosa que lleve a un desarrollo como individuo pero que no lleve a un desarrollo de la sociedad o, peor aun, vaya en detrimento de la misma.
  3. La ética debe ser indivisible así como el individuo lo es. Esto quiere decir que no podemos tener una ética como persona y carecer de una ética profesional, o ser tenedor de esta última pero carecer de ética ambiental. La ética de la persona es indivisible, no fraccionable, no debe ser modular y debe poder aplicarse a todas las facetas de nuestra vida sin edición de algún tipo. No podemos considerar ético que en nuestro rol de padres le enseñemos a nuestros hijos a no robar a la vez que, estando en  el rol de profesionales o trabajadores, robar nuestros materiales de trabajo, dotación o usar nuestro cargo para apropiarnos o desviar recursos en nuestro provecho particular y en detrimento de la sociedad o una fracción de ella. Nuestro comportamiento debe ser ético sin importar el rol que desempeñamos o el momento en el que estemos. No existe algo llamado la “ética total” o “totalmente ético” porque su existencia implicaría que también existe la “ética parcial” o el “más o menos ético”. La ética, al igual que el dilema de Hamlet en la obra de W. Shakespeare, es maniquea: “Es o no es” más no se es parcialmente, o no se es un poco.
  4. Los preceptos de la ética deben ser practicables. La ética es inmaterial pero sus postulados, transformados en acciones, deben poder palparse y evidenciarse. Los preceptos o postulados de la ética deben poder ir más allá de la mera teoría y discusión, deben poder ser aplicables en situaciones cotidianas o especiales y deben poder subsumirse hasta hacer parte de la estructura del individuo y su actuar para, desde ahí y a través del ejemplo, proyectarse como deseables para los demás individuos y por ende para las demás sociedades.
  5. Por último (por lo menos por el momento), en la ética importan tanto la forma como el fondo. Como bien nos cuenta Plutarco sobre Julio Cesar y su esposa Pompeya: “La mujer del Cesar no solo debe ser, sino parecer”. Eso quiere decir que en la ética NO todo vale, sin importar cuan loable sea el fin. El fin NO justifica los medios. No deben emplearse medios “moralmente” malos (acá me meto en la categoría de la moral pero solo de entrada por salida) aunque los fines sean buenos. Pero por otro lado, no deben perseguirse fines buenos que tengan efectos resultantes (o externalidades) desproporcionadamente malos (surgen entonces dos preguntas:¿cuánto es “desproporcionadamente”? y ¿quién mide esa resultante y la califica?)

Existirán muchas más características de la ética, se  las dejo como ejercicio reflexivo. Por mi parte quiero cerrar con dos elementos: El primero es una respuesta a una pregunta planteada por Diego Guevara en su artículo titulado “Paro nacional: las deudas de la política macroeconómica colombiana” publicado en el diario El Espectador en fecha 12 de mayo de 2021 (https://www.elespectador.com/economia/paro-nacional-las-deudas-de-la-politica-macroeconomica-colombiana/) cuando escribe: “Aún hoy muchos bancos centrales calculan con devoción la tasa de desempleo óptima que no acelera la inflación, conocida como NAIRU, por su sigla en inglés, y surge la pregunta: ¿es ético pensar en una tasa de desempleo óptima?” Bajo el marco de lo escrito en esta entrada a LOS JUANETES, y con el perdón de Juan David y su aversión a los absolutos, al ir el desempleo en contra de la vida digna, la calidad de vida y en últimas contra la vida misma al exponer a quien lo padece al hambre, la respuesta no puede ser otra distinta a un absoluto NO, no es ético pensar en una tasa de desempleo. Incluso si se pensase como una tasa con un valor óptimo de 0, en el solo hecho de considerar su existencia subyace la posibilidad de pensar en algún valor distinto lo cual admitiría la aceptación de un nivel mínimo de hambre y posibilidad de muerte por este factor.

Y lo segundo con lo que quiero cerrar, es con un agradecimiento enorme por tomarse el tiempo de leer estas cosas que escribo e, incluso si no están de acuerdo con ellas, extenderme muestras de respeto por mi perspectiva. Mis respetos y mejores deseos para todos ustedes.

Ingeniero Industrial - PhD en Desarrollo Sostenible #SustainableDevelopment #Sustainability

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