Recuerdas el tiempo de la infancia
y ves allí, en lo ido,
la luz bienhechora de un sol ya extinto;
el verde de un mar vegetal ya seco,
y la felicidad que siempre has de buscar.
Te engañas:
no volverás jamás a esos parajes,
no hallarás de nuevo ese éxtasis, esa plenitud.
Esa felicidad nunca fue.
En la infancia, como ahora, no fuimos felices.
Porque yo no estaba contigo,
porque tú no estabas conmigo.

Palmireña. Poetisa. Orgullosa mamá de Majo y Salomé ☕ Coffee Lover ☕

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